Los hermanos Wright

Hermanos cuya fama ascendio por los aires al mismo tiempo que ellos lo hacian en un avion y no descendio.

Sin embargo,cuando el avion bajo nuevamente al suelo,se supo poco de ellos o,por lo menos,nosotros sabemos poca cosa.

De los archivos de Aerolíneas Argentinas,por gentileza de Comodoro Guiraldes,hemos rescatado esta cronica:

_” Señores,no nos dejemos engañemos…la verdadera dificultad que durante años mantuvo al hombre alejado de las expediciones interplanetarias consistio en aprender a contar al reves…diez…nueve…ocho…siete…seis…cinco…cuatro…tres…dos..uno y cero,nos parece ahora algo muy facil de decir,pero para los antiguos,era en extremo complicado.

Ya en los albores del siglo dieciocho ( x palito,palito,palito ),un oscuro sabio autraliano habia hecho el siguiente calculo:

Si un canguro,utilizando dos de sus patas,puede saltar a cinco metros de altura,ese mismo canguro,con veinte patas saltaria a cincuenta metros,y con cien patas llegaria a una altura que para los habitantes  de la epoca,no era en absoluto despreciable.

La solucion era obia: la cruza de canguros con ciempiés!!!!...,esa cruza podria producir una nueva especie animal susceptible de ser encerradas en un vehiculos espaciales,con los cuales el hombre podria cumplir el viejo anhelo de incursionar por los aires.

La censura que reina actualmente en el pais y cierto natural sentido del pudor que caracteriza a esta editorial,me impiden entrar en detalles sobre las dificultades con que el canguro y la ciempieza tuvieron que lidiar para lograr su objetivo.

Pero basta mencionar para darnos una idea,que el canguro esta acostumbrado a procrear dando un simpatico salto para caer sobre la hembra.

La ciempieza no se quejaba de esta tecnica  ( por lo menos no se registraron protestas en los documentos de la epoca ),pero lo lamentable es que tampoco se registraron ciempiezas,pues estas desaparecian después del casamiento.

Cuando se decidio cambiar el sistema de cruzar ciempiés con canguros,los resultados tampoco fueron muy alentadores,seguramente por un problema de incompatibilidad matrimonial.

-Tenes los pies frios-,tal vez dijeran ellas,estropeando como es de suponer,el clima necesario para esos menesteres.

Años después un brillante inventor florentino afirmo:

-La onda seria inventar a los hermanos Wright.

-         All wright- contesto un colega,un poco atolondrado,que aprendia ingles en Aricana e invento la onda.

En el fondo la onda resulto una tonteria,pero en el jardin por lo menos servia para cazar pajaritos,pues aun no se habia inventado la H.

El mismo inventor florentino,al notar que sus palabras habian sido mal interpretadas,decidio inventar el Leonardo Da Vinci.

Leonardo resulto un buen muchacho,hizo bastante carrera,aunque mucho caso no le hacian: la sonrisa con la que la Gioconda acogio su idea de inventar el avion todavía figura en mas de una lata de dulce.

Pero eso no lo desanimo mayormente porque al poco tiempo invento una serie de aparatos voladores que eran una locura: Palanca al piso,asientos reclinables,duplex,con vista al mar,cuatro puertas,tipo sport,cruzado con dos botones,de todo,francamente de todo.

El dia que fue a estrenar el primer avion,el pueblo se congrego en el campo para verlo partir:

-A la una-dijo Leonardo con voz serena…

-A las dos- continuo impertubable…

-A la mierda!!!!!.....me olvide de inventar las alas!!!!-continuo mas tarde,malogrando el espectáculo.

Los años seguian pasando y un buen dia,alguien dijo:

-¿inventamos el avion?

-Eso es facil de decir-admitio el primero-

-¡ Difícil no es- y volvio a repetir:

-¡ Inventamos el avion?

-¡ Y si en vez de inventarlo,lo compramos hecho? Insinuo alguien.

Ese alguien era uno de los hermanos Wright.